Aquella
mañana, Carlos Bevaqua se despierta
con el pijama tan húmedo como sus
sábanas , además lo embarga una gran tristeza. Se siente profundamente
deprimido. luego va al baño ,se inspecciona las conjuntivas se mira la lengua,
buscando que podía ser esa rara sensación.
Decide
retirarse al dormitorio para luego
darse una ducha. Al dejar el baño, ve donde había estado parado, unos pequeños
charcos de agua en el lugar que apoyó sus talones.
Regresa
a ducharse, acomoda prolijamente en el toallero su pijama, baja la tapa del retrete, y se sienta tomando su cabeza con las
manos, apoyando los codos en las rodillas. Con la mirada fija en sus
pies, nota como se transforman y se queda dormido.
Cuando
su señora regresa de hacer las compras a, comienza a buscar por toda la casa, y al no encontrarlo decide ir al baño, donde està
solamente el pijama, colgado en la percha y un gran charco de agua al pie del inodoro. Carlos había
desaparecido.
LÀZARO
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