Un día se abre la puerta de la jaula,
el pájaro parece haber olvidado que tiene alas.
La angustia de no saber qué hacer con su libertad lo conduce al borde del abismo.
Se arroja al vacío con el deseo de morir poéticamente.
Un grito desesperado despierta su canto y abrazando el precipicio se eleva liviano.
Morir y nacer duran un instante.
Y después?
Denise